#8M2020

Gaby Lozoya
4 min readMar 10, 2020

Nunca había participado en una marcha, me daba mucho miedo, pensaba que era riesgoso, nunca le vi un verdadero impacto, cuestionaba ¿qué se ganaría después de marchar?, etc.

Nunca me había pronunciado a favor de un movimiento en temas tan fuertes como el feminicidio. He tenido mucho miedo de expresar mi punto de vista, por temor a ser mal calificada, afectada en mi trabajo o perder a mis personas cercanas. El miedo drena mucho.

Mi voz la comparto con mi familia y amigos muy cercanos.

Pero el 8 y 9 de marzo del 2020 se han vuelto inolvidables para mi.

Sentí orgullo, me sentí fuerte, me sentí recibida por mujeres que en mi vida había visto en mi ciudad.

Me sentí con mucha empatía, tratando desde lo más profundo de mi ser, apoyar a todas las personas que han perdido a una mujer en sus familias. LLoré y sentí un nudo muy grande en mi garganta. Pedí por ellos, pedí que ya no sucedan más cosas así.

Repruebo por completo cualquier tipo de violencia, sin embargo, puedo imaginar y comprender la impotencia que debe sentirse el no ser escuchada, el hacer todo tipo de denuncia y morir; o que se muera una amiga, una madre, una hija, una tía, una hermana y que no pase absolutamente nada.

Si yo pasara por algo así, estoy segura que no tendría ninguna duda en quererlo destruir todo, ni siquiera puedo imaginar de lo que soy capaz de hacer, si una de mis mujeres fuera lastimada, pero de lo que si sé es que sería con la rabia mas profunda que pueda salir de mi.

No importa si tuviste que trabajar, si no te fue posible hacer el paro.
No importa si no fuiste a alguna marcha.

Lo que importa es que pudimos reflexionar, en comprender a las personas afectadas; en que nuestra voz fuera escuchada aún sin pronunciar una palabra.

Simplemente con vestir un color morado, el tocar el tema en nuestras familias y coincidir que ya no queremos que sucedan más muertes por esta razón.

A las que hicieron el paro, a las que fueron a marchar juntas, a todas ellas mi más profunda admiración y gratitud. Por tener la fuerza de alzar la voz por todas las que sentimos miedo y que al escuchar su voz, se nos va quitando.

A mi hermana mi preciosa valiente guerrera, a mi mamá, a mis tías, a mis amigas que se unieron a este día, las amo más, las admiro por valientes y por su fuerza, por inspirarme y por hacerme ver lo valioso que es tenerlas junto a mi, mis maestras de vida.

Gracias a todas las mujeres del mundo, gracias a cada una de ellas, gratitud y plegaria para que todo esto genere consciencia y cambios llenos de valores y principios más humanos.

Gracias a los hombres que apoyaron este movimiento, gracias por su respeto, por su comprensión, gracias papá por siempre enseñarnos a hacernos respetar, a prepararnos, a ser inteligentes, fuertes y valientes, a las 3 mujeres de esta casa: mi mamá, mi hermana y a mi.

A todos los hombres que entienden la importancia de haber hecho esto y por fomentar el respeto, equidad y escuchar nuestra voz.

Y a los que no comprendieron, a los que no lo apoyaron y a los que se mantuvieron insensibles ante este suceso mundial o incluso se burlaron; si nada de esto, te hizo reflexionar y darte cuenta que algo está mal; la vida y la consciencia nos dan las lecciones que necesitamos para comprender.

Queda mucho por hacer, mucho por cambiar, mucho por educar, mucho por aprender pero definitivamente este es el principio, la tierra tiembla y grita que necesitamos hacer las cosas de diferente manera, que debemos unirnos, que todos somos uno, que todo esto trascienda para beneficio de todas y todos.

“¡Y que no se quede callado quien quiera vivir feliz!”. Atahualpa Yupanqui

#NiUnaMás #YoSiTeCreo #8M2020 #8M

Con todo mi amor
Gaby

--

--

Gaby Lozoya

Coordino el área de Innovación Tecnológica en gobierno. Me gusta crear comunidades y construyo el ecosistema de innovación del sur de Sonora, México